Los frutos secos pueden ser una excelente opción para incluir en una alimentación saludable debido a su alto contenido de nutrientes y beneficios para la salud.

Los frutos secos son ricos en grasas saludables, proteínas, fibra, vitaminas y minerales, lo que los convierte en una excelente fuente de nutrición. Además, también son ricos en antioxidantes y compuestos antiinflamatorios que pueden ayudar a reducir el riesgo de enfermedades crónicas, como enfermedades cardíacas, diabetes y ciertos tipos de cáncer.

Sin embargo, debido a su alto contenido calórico, se recomienda consumir frutos secos con moderación y elegir opciones sin sal ni azúcares añadidos. Una porción recomendada es de aproximadamente 30 gramos al día, lo que equivale a un puñado.

Algunos ejemplos de frutos secos saludables incluyen nueces, almendras, pistachos, avellanas, cacahuetes y anacardos. Puedes incorporarlos en tu dieta como snack o incluirlos en tus comidas, como en ensaladas o como una alternativa saludable a los ingredientes procesados en tus recetas favoritas.